Este año el gobierno planea salir de 100 empresas. ¡El negocio sigue!
César A. Luque F.
28/03/10
Contrario a lo que se pudiera pensar, que el gobierno está cerrando su ciclo de manera tranquila, hoy trabaja a toda marcha, no para solucionar los problemas de los colombianos pobres, sino para vender las pocas empresas que tiene el Estado, empezando por la concesión del tercer canal de televisión, que seguro será para el grupo económico que más le haya servido. Desde el poco conocido Conpes se han tomado decisiones que afectan al Estado, ya que se pretende salir de más de 100 empresas, que son de todos, no del gobierno.
El Conpes, (Consejo Nacional de Política Económica y Social), funciona bajo la dirección del Presidente de la República, integrado por el Vicepresidente, todos los ministros, así como los directores del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República, del Departamento Nacional de Planeación y el de Colciencias, todos los que tienen voz y voto, mientras son miembros permanentes, con voz, pero sin voto, el Secretario Jurídico de la Presidencia de la República y el ministro Consejero de la Presidencia de la República, mientras son miembros no permanentes en lo de su competencia, sin voto, los demás directores de Departamento Administrativo y los gerentes de los organismos descentralizados, siendo su secretario el Subdirector General del Departamento Nacional de Planeación.
Ese Consejo es la máxima autoridad nacional de planeación, siendo un órgano asesor del gobierno en todo lo relacionado con el desarrollo económico y social, debiendo coordinar y orientar los organismos encargados de la dirección económica y social del gobierno por medio del estudio y aprobación de documentos sobre esos temas.
La venta de las empresas del Estado es una prioridad del gobierno. La decisión fue tomada con la asesoría de un grupo de banqueros de inversión, me imagino, desinteresada. La decisión la defienden diciendo que es más barato vender las empresas que seguir teniéndolas, ya que para esos neoliberales, pero sobre todo negociantes, el Estado debe dedicar sus esfuerzos a la salud, educación, seguridad, lo que es cierto, pero no impide que tenga empresas rentables, que le generen recursos para usar precisamente en esas prioridades. Eso pasa con Ecopetrol, que sus dividendos son usados para la inversión en diferentes sectores del Estado. Vendida ¿que recursos le llegaran al Estado? Los yuppies sin corazón y sentido social no tienen respuesta.
El gobierno intenta pagar muchos favores antes de irse, y son muchos los favores que debe. La financiación de dos campañas presidenciales, y la recolección del referendo reeleccionista, que fueron financiadas por los contratistas del Estado, esos que están prestos a adquirir las empresas, que siendo productivas, les serán vendidas a precio de “huevo”.
Entre las empresas a vender, está la joya de la corona, Ecopetrol en un 15%, la empresa más importante del Estado, la que cada año le aporta más de 7 billones de pesos, para usarlos en salud y educación. Y así, la quieren vender, como ya vendieron una parte. Eso no es pensar en el país, sino en los intereses mezquinos de un gobierno que quiere gastar a manos llenas para hacer populismo, más ahora que debe impulsar a su candidato, ese que necesita lo reemplace, para que cubra todos los crímenes que se cometieron en estos ocho años, el dinero que se perdió en manos de quienes han gobernado, los fraudes, trampas, chanchullos que se hicieron para continuar con la hegemonía en el Congreso, pero también en el Consejo Superior de la Judicatura, la Fiscalía General de la Nación, la Procuraduría General de la Nación, la Contraloría General de la República, el Banco de la República, la Comisión Nacional de Televisión, los gobiernos departamentales, tipo Antioquia y el Valle del Cauca y algunos locales.
Otra que quieren vender es Corabastos, la plaza de alimentos más grande del país. Veamos ese negocio. El precio sería de unos $ 27.360 millones, cuando el sólo lote donde está vale unos $140.000 millones. Eso quiere decir que el que la compre ganará sin hacer nada, comprándola y vendiéndola se gana la bicoca de $110.000 millones. ¿No es un buen negocio? Para el comprador.
También quieren vender, o la participación del Estado en ellas, a Cavasa en Cali, Centroabastos en Bucaramanga y la Central de Abastos de Cúcuta. Los asesores neoliberales sostiene que esa labor de central de abastos se le debe dejar al sector privado, el que de seguro lo explotara, subiendo los precios al consumidor. Esa es la reflexión que ellos hacen, que los particulares ganen, así pierda el país, donde no hay política de seguridad alimentaria, esa que debe ser componente de la seguridad nacional, por encima de la llamada seguridad democrática, que incluye represión, tipo los mal llamados “falsos positivos”.
Otras de las empresas que irán a llenar los bolsillos de los particulares serán Isagen; Urra S.A.; Gecelca; Empresa de Energía de Boyacá; Central Eléctrica de Nariño: las Electrificadoras del Meta, Caribe y Caquetá; la Hidroeléctrica de Pescadero Ituango; el Acueducto Metropolitano de Bucaramanga; los Fondos Ganaderos del Huila, Meta, Córdoba, Antioquia, Tolima, Magdalena, Caldas, Santander, Cauca, Cundinamarca, Boyacá, Cesar y Atlántico; la Empresa Comercial Agroindustrial Llanogrande; Carebbean Sesame; Pausterizadora El Holandes; Compañía Occidental de Chocolates; Compañía Ferias y Mataderos del Caquetá; Norlácteos y el Centro Agroindustrial y de Exposiciones del Huila.
En un sector estratégico, y además muy rentable, el de los seguros, también se pretenden vender a La Previsora Compañía de Seguros S.A, Positiva Compañía de Seguros y la Bolsa Nacional Agropecuaria.
El tema portuario, indispensable para un verdadero desarrollo del país será afectado por la venta de las Sociedades Portuarias, de Buenaventura, Santa Marta, Cartagena, Barranquilla y la Colombiana de Transporte Ferroviario.
Los terminales de transporte terrestre no se salvan. Será vendida la participación del Estado en los terminales de Bogotá, Medellín, Pereira, Ibagué, Girardot, Armenia, Bucaramanga, Cartagena, Popayán, Manizales, Sogamoso, Villavicencio, Pasto, San Gil, Ipiales, Santa Marta y Cali.
Otras empresas que serán vendidas son Terpel del Centro, Ciudad Chipichape, Cales y derivados de la Sierra y Artesanías de Colombia, ésta última debe ser por ser la competencia de Salvarte, la empresa de los hijos del Ejecutivo.
Definitivamente este gobierno sigue, como en el caso Carimagua o Agro Ingreso Seguro, aplicando el lema de Hood Robin, “robar a los pobres para darle a los ricos”, pero los pobres, por ignorantes, quieren reelegir ese modelo, representado en varios de los candidatos presidenciales.